Días de APEC. Días de protocolos, visitas, conferencias, acuerdos, viajes. Toda una movida nacional e internacional, mientras la ciudad capital descansa en unos feriados obligados. Cuando vemos por televisión el desfile de grandes personalidades mundiales –más allá de Bush, que a pesar de centrar la atención de todos los medios, no es capaz de ocultar la presencia de gente como Alexander Medvedev, vicepresidente de Gazprom, la gasífera más grande del mundo o de José Pablo Arellano, presidente de Codelco, principal productor de cobre del mundo- podemos intuir también, la variedad de temas que se abordarán en este encuentro – desde temas netamente económicos y otros de carácter político como el desarme nuclear en Corea del Norte y las relaciones entre Moscú y Washington a raíz del conflicto con Georgia. Es lógico pensar que el tema de fondo es la crisis financiera por la que están atravesando las principales entidades y empresas del rubro, y por ende, el mundo entero.

Como vemos, lo que está aconteciendo estos días en el Perú, no es poca cosa. Nos podemos sentir orgullosos de ser anfitriones y de estar preparados para compartir estos días con otras culturas y expectantes de los resultados. Sin embargo, es sano preguntarse ¿cuáles serán los beneficios concretos de este APEC para el Perú?, ¿cómo se involucra la economía del peruano de a pie? Vemos que China ha sido la primera en darnos aproximaciones a esta respuesta. Pero, ¿por qué el inminente tratado de libre comercio (TLC) con China no ha causado una reacción mediática en el común de los peruanos? El presidente García se animó a hablar en chino, pero el peruano de a pie no entendió – y me atrevo a pensar que el presidente Hu Jintao tampoco.

Parece ser que los TLCs son hoy por hoy, la salida a las crisis económicas de los países como el Perú. Sin embargo, si revisamos las cifras vemos que la cantidad de productos chinos que entran, y seguirán entrando al país, sobretodo en el área textil, superan ya la capacidad de adquisición de la población económicamente activa –los remates y demás de las tiendas por departamento que van invadiendo el interior del país, son una muestra de ello. Asimismo, si revisamos brevemente nuestro comercio exterior vemos que a nivel de exportaciones nuestro principal destinatario y socio sigue siendo Estados Unidos (23 % del total de exportaciones) seguido de la Unión Europea (17%) y en tercer lugar China (9,5%).[Ver gráfico]. Bush viene a negociar un TLC bilateral y la semana pasada la UE aceptó reimpulsar un acuerdo similar con Perú y Colombia –hecho que despertó la protesta de otros países miembros de la Comunidad Andina de Naciones.

(Fuente: Sunat)

La señal que lanzan nuestros líderes es que solo tenemos un camino claro para el desarrollo, y ese camino es abrir las fronteras. ¿Estamos todos de acuerdo? Los que saldrán perjudicados en todo esto, vale decir, los productores locales de bienes y servicios que verán reemplazados sus productos por marcar extranjeras, obviamente no. En economía se habla de compensación, en política de equilibrio, y en la calle, ¿de qué se habla? No creo que estemos preparados a los niveles necesarios para compensar o equilibrar. Por varios años durante el gobierno anterior, se ha trabajado para aparejar la cancha, pero nadie nos dice si se ha logrado. Las cumbres, los foros y los acuerdos avanzan y esto no lo para nadie.

El comercio es así, pero lamentablemente en economía, como en otras ramas de las ciencias humanas, los resultados no se ven hasta que se viven. Y muchas veces esas vivencias son signos de muerte. Ya no se puede dar marcha atrás, sería volver a historias que han hecho más daño, pero no podemos de ninguna manera dejar que unos pocos sigan beneficiándose de muchos tantos. No nos vaya a ocurrir como al profeta Isaías que anunciando la presencia del Señor advierte la atrocidad del dominio de unos sobre otros, por el hecho de eliminar fronteras: “Manasés devora a Efraín, Efraím a Manasés, y ambos a una van contra Judá. Con todo eso no se ha calmado su ira, y aún sigue su mano extendida… ‘Con el poder de mi mano lo hice, y con mi sabiduría, porque soy inteligente, he borrado las fronteras de los pueblos, sus almacenes he saqueado, y he abatido como un fuerte a sus habitantes’” (Is. 66,10). Bienvenidos visitantes, bienvenido también el comercio justo, las reglas claras, la oportunidad de un desarrollo en igualdad de condiciones. Mucho del éxito de las negociaciones y del comercio está en nuestras manos, pero también mucho ignoramos y nos apresuramos a tomar viada cuando el camino no está aún terminado. TLCs ¿si o sí?, I don´t know, 我不知道

Juan Bytton, S.J. (Lima). Licenciado en Economía. Hace el Magisterio en la Pastoral Juvenil y la Promoción Vocacional.

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